viernes, 20 de enero de 2017

Adrenalina al borde del peligro


Sábado por la tarde, bastante aburrido de esos esos días donde no sales de tu casa por más que te inviten a rumbear o a una reunión, y en que solo piensas en descansar de la semana que es como si tu casa tuviera un campo magnético como un domo imaginario que solo al ver por la ventana ya sabes que la flojera no te dejará hacer nada durante ese fin de semana.. y yo estaba justamente en ese sábado.. No quería salir, ni chatear con nadie, ni ver películas, ni nada, Solo quería estar en mi cama haciendo literalmente nada.
   Ese día lo recuerdo más que bien, había dormido casi 10 horas en el día me había despertado a las 2 de la madrugada con aquel típico frío de la madrugada, prendí el Directv y en casi 800 canales no había nada interesante que ver, me levanté de la cama y fui a la cocina y me preparé algo rápido de comer: Mitad de un pan campesino con jamón y para acompañar un Nestea con bastante azúcar, una vez saciada mi hambre entré al Twitter desde mi celular buscando la manera de leer algo interesante pero no, solo habían típicos Trending Topic sobre noticias y uno que otro tema que era del día pasado, Esperaba volver a tener sueño en 5 mins pero el efecto de la azúcar del Nestea me activó y de repente pffff mi cerebro activó también esa parte del cerebro que quería nicotina debido al frio de madrugada asociada con el calor de un vicio, pero había un problema.. mis padres estaban en casa y no sabían que fumaba.. así que fui al pasillo oscuro y vi la puerta cerrada de su cuarto (supongo que estaban en un sueño intenso) y en modo casi automático busqué mis cigarros y el yeskero guardado en la prima gaveta de mi mesa de noche saqué un cigarro y me fui a la entrada de mi casa abriendo la puerta de mi casa con el menor ruido posible y salí a fumar al pasillo.. Hacía tanto frio que sentía ganas de fumar 2 o 3 cigarros más y durante ese momento lo estaba considerando y al terminarme el primer cigarro dije: “Voy por el segundo” y cuando me volteo  a la puerta de mi casa dije: “¿Y Las llaves?..” Con el afán de salir de mi casa haciendo la menor cantidad de ruido posible se me habían olvidado las llaves dejando la puerta cerrada (Esta solo se abre desde el lado de adentro) recordé que sabía abrirla con una tarjeta de crédito pero en mis manos solo tenía un yeskero “¿Qué hago? ¿Qué hago? ¿Qué hago? ¿Qué hago?” podía tocar el timbre varias veces despertando a mis padres para que me abrieran, pero ¿Qué excusa le iba a decir que había salido al pasillo a las 3 de la madrugada? Podía ir a casa de una vecina que conozco pero ¿Cómo la contactaba si el celular estaba dentro de mi casa y no me sabia su número de memoria?.. No tenía otra solución que quedarme sentado en las escaleras del pasillo esperando que amaneciera.. pero hacía demasiado frío como para congelarme sentado, así a los 5 mins de exceso de frio bajé al garaje y tenía pensado unir 2 sillas para acostarme mientras amanecía y así lo hice pero ahí estaba mi patineta es un rincón, acumulándose de polvo y llena de telearañas; mi mente sin ganas de dormir me dieron ganas de patinar.. Pero no podia patinar en una garaje de piso rústico así que la tomé y me fui con ella hasta la entrada de mi casa, salté la baranda principal del estacionamiento de carros y ya estaba ahí: Solo con mi patineta vestido con un short y una franelilla de dormir en la calle.
   No podía dejar de pensar en la fría brisa: mi boca, las piernas, y hasta los brazos me temblaban y por más que usaba el Yeskero para darme calor parecía que hacía más frio que otras noches. Mi mente sin sueño fue como si me hubiese hablado y se me vino a la mente patinar y gravitear por toda la calle.. y así lo hice: Vi a lo lejos la calle a lo máximo Una cuadra de carros estacionados en doble fila que se perdían en la oscuridad de la noche, árboles que cubrían la entrada a las otras residencias y al fondo luces de postes de luz en seguidilla. Empecé a patinar por el medio de la calle, las ruedas de mi patineta eran el único ruido de toda la calle a cientos de metros, pero seguí hacia adelante tomando varias bajadas que llegaban a la avenida principal.
   Redactando esto me di cuenta que para ese momento era muy inmaduro, tan solo era un chamo menor de edad en patineta de madrugada en la ciudad mas peligrosa del mundo <<Caracas>>, pero en ese momento fue como si la vida me hubiese puesto en esa vivencia, Tan solo quería saber que se sentía patinar de noche por el medio de la calle, sin carros y sin peatones pero solo veía hasta ahí no veía el peligro que corrí.
   Al haber patinado 20 minutos sobre la avenida principal que lleva a la autopista a la derecha vi en la orilla varias personas con sweater oscuros con capucha grafiteando una pared con cientos de aerosoles en el piso, lo hacían con rapidez y parecía que el objetivo era que quedara bien antes de que fueran vistos, al pasar frente a ellos se dieron cuenta de mi presencia pero decidí seguir de largo. La noche en Caracas era bastante desagradable, tenía que esquivar basura y escombros poco visible que había en el asfalto maniobrando la gran cantidad de objetos sin razón alguna, poco tiempo de seguir rodando llegué a una calle algo empinada y cerca de ellos habían bastante carros estacionados y vi como 2 sujetos en franelilla trataban de abrir un carro sin que le sonara la alarma utilizando cosas que no alcanzaba a detallar, a pasar muy cerca de ellos se me quedaron mirando fijamente pero seguramente al verme vestido de esa manera pesaron que estaba buscando lo mismo
La adrenalina ya me estaba empezando a subir, seguí patinando entre la oscuridad y podía ver la cantidad de indigentes que dormían en las calles, también con frio, acobijándose bajo los cartones y haciendo caso omiso de alguien con una patineta, es decir, mi presencia.. Después de casi 1 Km de haber patinado llegué a una plaza donde había poca iluminación pero habían muchas personas entre hombres y mujeres vestidos normales sentados, pero ya era lo que suponía “Una plaza de droga” y si efectivamente así era y se les notaba porque el olor a crack y la risas de varios los delataba al pasar por ahí lo hice lentamente para que no sospecharan de mi y prácticamente pasé desapercibido, al parecer ni les importó que estuviera ahí quizá porque pensaron que sería un posible cliente o que iba a ir ahí, La adrenalina me cambió a miedo en cuestión de segundos y seguí de largo solo que está vez tenía miedo de que vinieran tras de mi o que pensaran que era un sapo o la competencia así que seguí patinando cada vez más rápido pero nadie me seguía, eran solo cosas mías, Rodé tanto (no sé si por el frio, por el miedo o por la adrenalina) que llegué a una famosa Avenida de Caracas de zona de tolerancia, era demasiada diferente como para  lo que me imaginaba.. A la orilla habían toda clase de prostitutas, transexuales que estaban en cada esquina hablando entre ellas, fumando, y con una vestimenta que costaba saber si eran hombre o mujeres..
   Casi por amanecer, seguí patinando siguiendo la calle mejor asfaltada sintiendo que no podía ver algo peor hasta que llegué a las cercanías de una discoteca de mala muerte donde veía salir personas del local bajo los efectos del alcohol haciendo cualquier cantidad de pasos en falso para caminar, a mi parecer eran las 5 AM..  Yo sólo estaba estaba esperando que abrieran el metro para montarme en cualquier estación, pero mientras esperaba seguí patinando y decidí recortar distancia por una trasversal cuando en eso veo 4 personas a pocos metros (2 hombres y 2 mujeres) siendo apuntadas por un cuchillo o algo punzante por 2 chamos con mal aspecto pidiéndole las pertenencias con insultos.. Al ver esto no supe que hacer, si devolverme, o ayudar o seguir de largo.. Fácilmente todos se dieron cuenta pero pasé lo más lejos posible sin decir ni una sola palabra como lo había hecho desde que había salido de mi casa..
   Llegué a la estación del metro más cercana y ya estaban subiendo la santamarias así que fui casi que el primero en entrar y bajé a la desolada mezzanina, esperando casi 15 minutos el primer tren estaba sentado sobre mi tabla meditando todo lo que vi en tan solo 2 horas de algo que no se ve en películas..
   Tomé casi 10 estaciones para poder regresar a mi casa, al llegar ya estaba amaneciendo por lo que cuando llegué, toqué el timbre y mi papá abrió la puerta sorprendido alistándose para ir a trabajar pero no se preocupó porque le dije salí desde muy temprano a trotar y se me habían quedado las llaves en mi cuarto.  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario